Confiture de Nectarine et Fraises

Pues bien, trás días de pensarlo y meditarlo...me atreví a realizar mi primera Confiture. Como de costumbre, no sabía por donde empezar así que busque ayuda en mis colegas Nicolette y Clotilde, quienes me animaron y me dieron el más sabio consejo: "Solo hazlo". Con una libra de valor a mis espaldas, y acompañada por mi querido Mik, me dirigí al Union Square Outdoor GreenMarket, quizás uno de los sitios en mi amada Big Apple donde puedo sentirme como verdadera parisienne.

Sin temor a mentir, podría decir que en NYC pagar por frutas y vegetales de verdad no es algo que esté al alcance todos los días. Gastas más, sí, pero la diferencia de sabor y calidad es altamente notable...creeme que no cualquier esposo se dá cuenta de esto! Preferí ir seguro con los albaricoques, vestidos con ese tono naranja y su maravilloso aroma me cautivaron desde un principio.

Les Confitures, o jaleas de frutas, son bien conocidas por ser parte del desayuno francés. Oh là là! casi puedo sentir el fresco olor de un baguette recien horneado o un croissant au beurre...miam miam! Le petit dejeuner, no es un ritual en Francia, a diferencia de lo acostumbrado en América. Este simplemente consiste en algunas frutas de estación, o bien las tan deliciosas tartinas (rebanadas finas de baguette) con mantequilla y confiture maison (jalea hecha en casa), acompañado de un café expresso o un tazón (bowl) de chocolate caliente, muy común en los ninos. Es muy típico, asimismo, que los franceses salgan temprano en la mañana a comprar pan fresco recien hecho, usualmente en los fines de semana.

Aunque consiste en pocos ingredientes, debo advertirte que ésta receta necesita muuuucha paciencia, especialmente si esta es tu primera vez. Pierde el miedo a la espera, porque el resultado valdrá la pena ;) Con mis nectarinas en mano, unas cuantas fresas congeladas, azúcar y las ganas de seguir adelante con mi cocina francesa, estaba más que lista...

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Los ingredientes son muy sencillos de encontrar. Tan solo necesitas azúcar, frutas de estación (en este caso, yo utilicé nectarinas y fresas previamente congeladas) y el jugo de un limón. Las jaleas o Confitures sirven para preservar frutas, que usualmente no están presentes todo el año, para poder degustarla en los meses de invierno. Esto si es un ritual típico en Francia, especialmente en el sur!

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Los albaricoques debes lavarlos, pelarlos quitarles la semilla y cortarlos. De igual forma procedes a hacer esto con las fresas. El tamaño de los cubos de frutas es a tu elección, sin embargo, recomiendo que sean trozos pequeños, si ustedes son personas que no soportan grandes sorpresitas en la comida! ;)

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En un bowl, coloca las frutas y agregale el azúcar. Revuelve muy bien hasta obtener una consistencia de sable mouillé. Un truco muy práctico es utilizar un majador de papas para que las frutas suelten un poco su jugo y quede casi como un puré.

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Aunque por ahora tus frutas no lucen muy bien, es importante que obtengan esa textura de arena húmeda.

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Añade la mezcla de frutas con el azúcar a una olla grande y agregale el jugo de un limón. Revuelve cada cierto tiempo para evitar que las frutas se peguen y quemen en el fondo. Comienza con fuego medio...

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...et Voila!! empieza el proceso más esperado!! como dije anteriormente, paciencia será el principal ingrediente de nuestra Confiture Maison. Sigue revolviendo con una cuchara de madera cada 10 ó 15 minutos...

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Con un fuego mediano, deja hervir (mostrado en la imagen) e inmediatamente pasa a fuego bajo. Ahora bien, este procedimiento  es largo y lento, y todo dependerá de la consistencia que desees lograr en tu Confiture. Manten el fuego lento por 1 o 2 horas (yo lo hice por 2 horas, mi jalea quedó un poco gruesa para mi gusto, por lo que llegué a la conclusión de que 1 hora o 1 hora y media funciona mejor; pero no olvides que esto es completamente algo personal). Recuerda revolver para evitar que las frutas se peguen.

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Mientras tu Confiture de Nectarine et Fraises está a fuego lento, puedes comenzar con el proceso de conservación. Es importante desinfectar y esterilizar las jarras destinadas para nuestra jalea. Es algo muy simple...primero, lava las tapas y frascos en una solución jabonosa y enjuaga muy bien. Segundo, coloca los mismos en agua hirviendo por 5 minutos y finalmente, dejalos secar completamente encima de una toalla de cocina bien limpia :)

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Tras la larga espera de dos horas, así lucirá tu Confiture Maison! :) Si lo deseas puedes retirar la espuma que se formó durante el proceso. De inmediato, llena las jarras con la jalea de frutas y tapa muy bien tratando, en lo posible, de eliminar el exceso de aire. Miam! Ojalá pudiera describir el maravilloso olor que impregnó mi casa anoche...C'est merveilleux!

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Antes de probarla, te recomiendo que dejes reposar tu mermelada al menos durante la noche. La Confiture Maison, podría durar meses guardarda en un sitio fresco y oscuro. Una vez abierto, lo mejor es mantenerla refrigerada. Mi corazón parisino late al ver esta imagen... La confiture et le pain han llegado para convertirse en los reyes de mi petit dejeuner...Bonne chance! :) 

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Lo que aprendí hoy...

* Paciencia, paciencia y más paciencia. Es un proceso largo, pero bien vale la pena el orgullo de tener en la mesa tu propia Confiture Maison.

* Existen muchas frutas que no tienen suficiente pectina, lo cual no permite que la mezcla se convierta en jalea. Estas frutas pueden ser piña, uvas, naranjas, etc., si decides realizar jalea con las mismas, simplemente agrega la cantidad necesaria de pectina en polvo (fácil de encontrar!). De lo contrario, haz combinaciones con frutas que contengan más pectina. Por ejemplo: fresa-piña, manzana-fresa, naranja-durazno...las posibilidades son infinitas!

* Siéntete libre de utilizar azúcar morena, rubia o blanca. Incluso puedes experimentar con miel.

* Si tu Confiture queda demasiado gruesa y espesa, agrega una o dos tazas de jugo de uva, coloca a fuego lento hasta que hierva y revuelve hasta obtener la consistencia que deseas. Repite el proceso de conservación.

* Existen muchas maneras de preparar jalea en casa. Práctica hasta que encuentres la técnica con la que más te sientas a gusto Sí, yo seguí una receta, pero también hice algunos ajustes para hacerla completamente mía :) ;)